Blanco Larrosa 2019: La Garnacha Blanca, en Rioja Alavesa

La Garnacha Blanca vive un buen momento. De ser una variedad en verdadero peligro de extinción, ha ido poco a poco recuperando terreno y cada vez podemos encontrar más estupendos monovarietales de esta mutación "albina" de la garnacha tinta. Una uva con la que se elaboran blancos con cuerpo y personalidad, un estilo de vino que actualmente tiene una estupenda aceptación.

La garnacha blanca está asociada en mi cabeza con Cataluña, ya que es una de las variedades más populares entre los blancos de denominaciones como Terra Alta (donde cuentan con la mayor cantidad de hectaréas de garnacha blanca del mundo), Priorat o Montsant. La razón es que era la utilizada para los blancos dulces y "rancios" tan típicos de estas zonas. Aragón, Navarra y La Rioja completan el peculiar paisaje de esta uva de alma mediterránea a la que le encanta el Valle del Ebro.

Es una superviviente nata, con una gran capacidad de resistencia al calor y a la sequía, que bien cuidada desde la viña e intentando que no "se dispare" su graduación alcohólica y que conserve su acidez, da como resultado unos vinos "de boca", sedosos, con cuerpo, con unas exquisitas notas florales y frutales llenas de elegancia y personalidad.

En esta ocasión voy a centrarme en la Rioja, una zona donde casi desapareció (tuvieron que recopilar material vegetal de sus cepas más viejas porque llegaron a contar solo con 11 hectáreas de garnacha blanca en toda la DO). Ha sido durante muchos años el "arma secreta" de muchos de los grandes blancos riojanos y desde hace algún tiempo vuela sola y a la vista en vinos como el que os presento ahora. Un 100% garnacha blanca que derrocha saber estar. 

 

Blanco Larrosa 2019 Garnacha Blanca.

Bodegas Izadi. DO Ca. Rioja.

Los de Izadi han hecho una apuesta honrada por las uvas locales de La Rioja Alavesa desde sus comienzos y así no es de extrañar que nos presenten la que es ya segunda añada de este especialísimo garnacha blanca. 

Los viñedos de los que bebe este Larrosa Blanco (tienen otro rosado elaborado con garnacha), están situados en Villanueva de Álava, a 600 metros sobre el nivel del mar y proceden de una selección de las tres mejores parcelas de esta uva con las que cuenta la bodega.

Mis apuntes de cata: Como los vinos que conforman esta línea "larrosa" es muy elegante y fragante. Un blanco que sin perder frescura te "gana" con una boca plena, golosa y ligeramente amarga al final. Es muy aromático, con multitud de tonos florales y frutales y si no conoces esta variedad de uva, muy minoritaria en Rioja, es una estupenda manera de acertarte a su versión más fresca e inmediata. ¡Súmate al garnachismo, también en blanco!

Con qué me lo tomo: Con unos California Rolls va estupendo.

Cuándo me lo tomo: Es ideal para terminar esta primavera y comenzar el verano bien fresquitos.

Cuánto cuesta: En torno a los 7,5 euros.

La B.S.O.: Esa botella tan elegante y sencilla al tiempo me recuerda a Audrey cantando el Moonriver en el alféizar de la ventana. Porque se puede ser una diva con una toalla en la cabeza. Y así veo yo a este vino.